Caminando en la Oscuridad

©Javier Sanchez Saez

"Algunas afirmaciones están destinadas a pasar, otras a despertar ecos"

     El pensamiento es un componente real del ser. La gente con un intelecto poderoso, nunca está muy segura de si todo es, o no, un sueño. El individuo carece de medios para contrastar, para poner a prueba lo que hay en su corazón, me refiero al amor, al anhelo del mundo exterior, a la emoción desbordante hacia la belleza para la que existen términos aceptables de conocimiento.

     ¿Hemos nacido para vivir eternamente en la oscuridad?

     No alcanzar la conciencia es una condición necesaria para la dicha de la psique. A veces me pregunto si la diferencia entre el éxito y el fracaso está marcado por el dinero. Aferrarse al dinero es difícil, es como intentar coger un cubito de hielo. Y tampoco puedes ganarlo y vivir tranquilo, eso no existe. Cuando consigues dinero, sufres una metamorfosis, tienes que luchar contra fuerzas poderosas dentro y fuera de ti. El éxito es siempre el éxito del propio dinero.

     El ser humano se obsesiona por estas cuestiones, el dinero, el éxito, la muerte, pero sobre la muerte se ha escrito mucho. Una de las citas que leí hace poco decía según Walt Whitman, este estaba convencido de que la democracia fracasaría no ser de que sus poetas le dieran grandes poemas sobre la muerte... En fin, hay especialistas que opinan que una memoria tan compleja es un síntoma de histeria.

     Los pensamientos tendrían que ser reales, las palabras deberían tener significado definido y un hombre debería creer en lo que dice. Palabras... Palabras... Palabras...